En los últimos años, Snapchat ha introducido tantos filtros diferentes que los usuarios ni siquiera piensan en el impacto que el uso aparentemente inofensivo de filtros tiene en su psique.
La revista JAMA Facial Plastic Surgery realizó un estudio y descubrió que los filtros de Snapchat que les gusta usar a los jóvenes tienen un efecto perjudicial en la psique.

Estos filtros están supuestamente diseñados para corregir la apariencia: se pueden utilizar para cambiar la forma de la nariz, el corte de los ojos, agrandar los labios o hacer más prominentes los pómulos. La gente siempre se ha esforzado y se esforzará por alcanzar la perfección, y gracias a la aplicación ésta se hace más real. Por desgracia, algunos se sumergen tanto en esta "perfección" que llegan a recurrir a la cirugía plástica. En este sentido, el médico estético Tijion Esho ha llegado a introducir el concepto de "dismorfia de Snapchat".

En los últimos años, Snapchat ha introducido tantos filtros diferentes que los usuarios ni siquiera se dan cuenta del impacto que el uso aparentemente inofensivo de filtros tiene en su psique.
La revista JAMA Facial Plastic Surgery realizó un estudio y descubrió que los filtros de Snapchat que les gusta usar a los jóvenes tienen un efecto perjudicial en la psique.

Estos filtros están supuestamente diseñados para corregir la apariencia: se pueden utilizar para cambiar la forma de la nariz, el corte de los ojos, agrandar los labios o hacer más prominentes los pómulos. La gente siempre se ha esforzado y se esforzará por alcanzar la perfección, y gracias a la aplicación ésta se hace más real. Por desgracia, algunos se sumergen tanto en esta "perfección" que llegan a recurrir a la cirugía plástica. En este sentido, el médico estético Tijion Esho llegó a introducir el concepto de "dismorfia de Snapchat".

Más de una vez, adolescentes y jóvenes han acudido a él para pedirle que les haga parecerse a la foto. El deseo de "editarse" con filtros conduce a un desafortunado resultado: desarrollan la enfermedad de la dismorfia, es decir, el rechazo a sí mismos, a su cuerpo y a su aspecto en general.

"No hay nada malo en usar filtros. Lo malo es cuando la gente intenta parecerse a la imagen ideal que se ha creado con ayuda de la cirugía", - esta opinión la expresó Tijion Esho.

Todo el mundo quiere ser bello, y cada uno consigue el resultado deseado a su manera, pero, como suele decirse, todo debe ser con moderación, y las aplicaciones de los smartphones no deben convertirse en una herramienta para destruir tu cuerpo y tu psique.