Desde siempre, las personas han buscado la belleza y la individualidad para destacar y llamar la atención. Los accesorios desempeñan un papel fundamental a la hora de completar nuestros looks, añadir puntos focales y atraer las miradas. Estas baratijas, aparentemente pequeñas pero esenciales, tienen historias fascinantes y han evolucionado significativamente hacia sus formas modernas.
1. Pendientes
Los pendientes se remontan a casi todas las civilizaciones de la historia, independientemente de la época y el lugar. Originalmente, los pendientes los llevaban sobre todo los hombres y tenían un significado sagrado en diversas culturas. En el antiguo Egipto, por ejemplo, un pendiente simbolizaba la pertenencia a la clase social más alta. Por el contrario, en la antigua Roma se obligaba a los esclavos a llevar pendientes, mientras que en la antigua Grecia se asociaban a personas dedicadas a la prostitución. Con el tiempo, los pendientes en Europa pasaron de ser joyas masculinas a adornos principalmente femeninos.
En muchos países, como Rusia, el tipo de pendientes que llevaba una persona podía significar su estatus social. Examinando el estilo y el material de los pendientes, se podía determinar fácilmente la riqueza y la posición de una persona en la sociedad.
2. Cinturón
Hoy en día, los cinturones están al alcance de todos, pero en el siglo III a.C. estaban reservados exclusivamente a los faraones del Antiguo Egipto y sus allegados. Los orígenes de los cinturones modernos se atribuyen a menudo a los persas, un pueblo nómada que los utilizaba por comodidad. Los cinturones servían para mantener el cuerpo caliente mientras se montaba a caballo, asegurando que la ropa se ajustara perfectamente a la piel.
Durante la Edad Media, los cinturones se popularizaron y se hicieron más estrechos y sencillos. Se llevaban alrededor de las caderas y servían para transportar bolsas de dinero, amuletos, colgantes e incluso armas. Sin embargo, su popularidad fue decayendo.
El interés por los cinturones resurgió en el siglo XX, principalmente debido a los conflictos militares mundiales. Una vez concluidas las guerras, los británicos popularizaron los cinturones como elementos esenciales de los atuendos elegantes y de negocios.
3. Embrague
Es difícil imaginar el conjunto de noche de una mujer moderna sin un clutch, un pequeño bolso de mano. La historia de este accesorio se remonta al siglo XVI, cuando se introdujeron los monederos, inicialmente destinados a guardar dinero. Poco a poco fueron aumentando de tamaño y las damas empezaron a utilizarlas no sólo para llevar dinero, sino también joyas, espejos, cartas de amor e incluso diarios personales.
A finales del siglo XVI, los monederos se adornaron con piedras preciosas y relieves de oro, y se pusieron de moda los bolsos llamados "reticules". En Inglaterra, estos bolsos se conocían como "clutches", en alusión a su naturaleza de bolso de mano. A finales del siglo XIX, los clutches habían evolucionado hacia su forma moderna, con una forma alargada y una correa para la muñeca.
A principios del siglo XX, los clutches cayeron en desgracia debido a las adversas condiciones políticas mundiales. Sin embargo, el accesorio recobró popularidad gracias a diseñadores de renombre como Coco Chanel y Christian Dior. Coco Chanel, en particular, rara vez era vista sin un pequeño bolso en la mano, lo que inspiró a muchas mujeres a emular su estilo.
4. Abanicos
Hoy en día, los abanicos sirven como accesorios de moda para sesiones fotográficas, desfiles de moda o representaciones teatrales históricas. Sin embargo, en la Edad Media, las chicas utilizaban abanicos durante las salidas festivas y dominaban el "lenguaje del abanico".
Los abanicos se introdujeron en Europa desde Oriente a través de las rutas comerciales, convirtiéndose en elementos indispensables del atuendo femenino en los siglos XVI y XVII. Estos accesorios se fabricaban con diversos materiales, como cuero, seda, placas de nácar, papel resistente, con pinturas, encajes y plumas de avestruz. El color del abanico transmitía un significado: los negros significaban tristeza, los rojos alegría y los marrones felicidad.
Los abanicos también se utilizaban para pasar mensajes secretos entre las muchachas, destinados a personas concretas. Además, los abanicos incorporaban a menudo pequeños espejos para poder observar discretamente a los hombres y atraer su atención reflejando la luz del sol.
En el siglo XIX, el "lenguaje del abanico" había perdido relevancia, pero los abanicos en sí siguieron de moda durante un largo periodo. Durante esta época, los diseños de los abanicos evolucionaron para incluir motivos botánicos y ornamentales, así como motivos de la antigüedad.
En algunas regiones de China, los abanicos se siguen utilizando para transmitir información. Cuando dos personas se acercan, levantan un abanico con jeroglíficos escritos para que la otra persona pueda leerlos fácilmente.
5. Guantes
La historia de los guantes es anterior a la era común, ya que inicialmente servían como elementos de protección. En la antigua Roma, los guantes se utilizaban para proteger las manos del agua caliente y la comida.
Durante la Edad Media, los guantes adquirieron una función estética y se adornaron con perlas, piedras preciosas, oro y plata. Pasaron de ser una necesidad práctica a convertirse en un accesorio de moda que realzaba el estatus y que solían llevar los monarcas. En el siglo XIV, los guantes llegaban incluso hasta el codo, gracias a la innovación de la reina Isabel I de Inglaterra. Sin embargo, los guantes masculinos perdieron popularidad y fueron utilizados principalmente por los mosqueteros franceses.
Napoleón Bonaparte desempeñó un papel fundamental a la hora de reavivar el interés de los hombres por los guantes, amasando una importante colección. En el siglo XIX, los guantes masculinos adoptaron un estilo más austero y minimalista, desprovisto de adornos. Por su parte, los guantes femeninos se volvieron extravagantes, y los guantes sin dedos se convirtieron en una tendencia notable.
Hasta los años treinta, los guantes de mujer siguieron siendo un elemento básico del atuendo femenino. Sin embargo, en 1968, los guantes se asociaron simbólicamente con la afectación, la hipocresía y la falta de sinceridad. A pesar de ello, los guantes han vuelto a la moda moderna, cumpliendo funciones como la protección contra los elementos, al tiempo que ofrecen variedad y decoración.
December 19, 2023