La trayectoria de Paloma Elsesser hasta ser nombrada Modelo del Año en los Premios de la Industria es la extraordinaria historia de una joven que nunca aspiró a formar parte de la industria de la moda. Aquí tienes todo lo que necesitas saber sobre la chica que ha desafiado las convenciones y ha causado un impacto significativo en el mundo de la moda.

Paloma nació en Londres, pero pasó sus años de formación en Los Ángeles. Cuando se trasladó a Nueva York para estudiar, sus intereses se centraron sobre todo en la literatura y la psicología. Ya de niña, Paloma soñaba con ser poetisa y le apasionaba escribir poesía. El mundo de la moda no le atraía y, durante sus años universitarios, se sintió atraída por las fiestas artísticas. Según sus propias palabras, sus aspiraciones se limitaban a convertirse en DJ, lejos de posar para las portadas de las revistas de moda.

El punto de inflexión llegó cuando se cruzó en su camino Pat McGrath, la reputada maquilladora a la que Paloma se refiere cariñosamente como su hada madrina. En 2015, el estilo de Paloma como futura modelo de tallas grandes dejaba mucho que desear: lucía unas botas Timberland rojas, una camisa color pitón y dos sudaderas. Se dedicaba activamente a mantener su perfil de Instagram y participaba en la organización de giras para su amigo, el rapero Earl Sweatshirt. Un día, recibió un correo electrónico de Pat McGrath, que estaba lanzando su línea de cosméticos y buscaba caras únicas. Para Pat McGrath, Paloma era la candidata perfecta, a pesar de haberse delineado las cejas con un lápiz marrón y de llevar un piercing de oro en la nariz. A McGrath le cautivó la negativa de Paloma a ajustarse a las normas convencionales y su inquebrantable autenticidad. Paloma aceptó con entusiasmo la oferta de la maquilladora.

Al describir a Paloma, Pat McGrath dijo: "Es una Dorothy Dandridge, Lena Horne o Rita Hayworth moderna. Tiene algo cinematográfico. Admiro su cara, su cuerpo y su mente. Siempre está llena de diversión y alegría".

Tras su aparición en una campaña publicitaria de cosméticos, la estrella de Paloma empezó a subir. Su aspecto poco convencional la llevó a la portada de Wonderland, y no tardaron en llegar las colaboraciones con H&M. Nike la eligió como imagen de una campaña de ropa. Nike la eligió como imagen de una campaña publicitaria de ropa interior, siendo la primera vez que seleccionaban a una modelo con una talla 50. Los representantes de la marca pretendían demostrar a las mujeres que la ropa interior deportiva tenía aplicaciones más allá del gimnasio.

Como la bautizó American Elle, la "musa de Pat McGrath" colaboró activamente con la marca de Rihanna, Fenty, y apareció en las portadas de Vogue de cinco países distintos. Sin embargo, su verdadero éxito se produjo en otoño, cuando Elsesser se convirtió en la primera modelo de tallas grandes en desfilar para Salvatore Ferragamo, un momento histórico para la marca. Ese mismo año, Paloma participó con éxito en nueve desfiles de moda, todo un logro para una modelo de tallas grandes.

Paloma ve su nueva fama desde una perspectiva filosófica. No le interesa el frenesí mediático y le mueve el deseo de inspirar con su ejemplo a otras mujeres con formas corporales diversas. Asume la responsabilidad de representar a las mujeres de tallas grandes, que a menudo se sienten marginadas en la industria de la moda.

"La sociedad se está dando cuenta de que, tengas el aspecto que tengas, hay un lugar para ti en todas partes. A nadie le gusta que le pasen por alto, y las grandes empresas están empezando a darse cuenta de ello", afirma Paloma Elsesser.