Es muy probable que recuerdes la vez que Rihanna y A$AP Rocky cerraron la alfombra roja de los Fashion Awards en 2019. O la miríada de momentos Kate Moss a lo largo de los años. Pero, ¿puedes recordar lo que lució Jonathan Rhys Myers en 2004? Y el discreto look de Lee Alexander McQueen en 1997? Aquí tienes sus mejores looks de la mayor -y más ecléctica- recaudación de fondos de la moda londinense.

Cara Delevingne, 2012
En 2012, Cara Delevingne ganó el premio a la Modelo del Año y lució un minivestido verde metalizado de Burberry que la hacía parecer una Quality Street de la mejor manera posible. La colección de Christopher Bailey de gabardinas metálicas y bolsos transparentes parece igual de cool una década después. En lugar de zapatos peep-toe metálicos, yo lo llevaría con medias negras y botas gruesas.

Phoebe Philo, 2010
Parece un momento oportuno para revisar el catálogo de la alfombra roja de Phoebe Philo, dado el daño que el lanzamiento de su marca homónima hizo a las cuentas bancarias de las mujeres el mes pasado. Esta foto fue tomada cuando Phoebe acababa de empezar su etapa al frente de Céline, que cambió la industria. Trece años después, el mono negro y la americana (y el clutch, y el puño) a medida de Phoebe siguen pareciendo frescos, chic, como si los hubiera llevado en 2010. Lo que resume su magia.

Miuccia Prada, 2018
Mamá Miuccia no tiene parangón en ningún ámbito. Cuando se trata de su estilo personal, abandera sus diseños, que van desde extravagantes abrigos de plumas y vestidos con flecos de neón hasta prendas más sobrias pero de corte impecable. Me siento especialmente atraída por esta última categoría, y un momento memorable fue cuando la Sra. Prada recibió el Outstanding Achievement Award en Londres, enfundada en un pijama clásico de seda que encarnaba la elegancia y la comodidad, cualidades que se alinean perfectamente con mis gustos (ojalá).

Lee Alexander McQueen, 1997
Soy alguien que lleva "pantalones de chándal asquerosos" y "botas UGG manchadas" -en palabras de un colega mío- en una oficina donde otras personas visten americanas de Saint Laurent y shorts de Miu Miu repletos de cristales. Esto se debe a que considero opresivos los códigos de vestimenta (incluidos, entre otros, los trajes). También me han dicho que soy una odiosa y que "no sé divertirme"... pero cuando pasas la mayor parte de tu tiempo escribiendo sobre la ropa de los demás, lo último que quieres hacer es volver la vista hacia dentro y empezar a considerar y construir tu propia imagen. Creo que hay un poder en esforzarse un poco menos que los demás: llama la atención sobre las cualidades más esenciales del carácter de una persona y sugiere que puedes ver más allá de los dictados de lo que es o no apropiado para vestir. Por eso me atrae el momento en que Lee Alexander McQueen fue nombrado Diseñador Británico del Año en 1997, vistiendo nada más sofisticado que una chaqueta vaquera y un polo. Parecía que estaba en el pub.

Naomi Campbell, 1993
¿Creías que Naomi Campbell sería superada por un par de tacones? Desde luego que no. Seis meses después de que la súper londinense se sacudiera el polvo en la pasarela de Vivienne Westwood tras caerse con sus cuñas moradas, se presentó en The Fashion Awards con unos zapatos azul real con el subtexto: perra jefa. ¿Su mejor accesorio? Kate Moss, que lució unos zapatos de fiesta igual de mareantes como apoyo moral.

Rihanna, 2014
Si necesitabas una prueba más de que Rihanna siempre ha ido por delante, adoptó la tendencia sin pantalones mucho antes que nadie. En la ceremonia de 2014, la cantante optó por un smoking oversize de terciopelo de Stella McCartney, abotonado hasta la altura del ombligo, que combinó con una deslumbrante gargantilla de diamantes, medias transparentes y tacones de aguja de charol. Así es como se impone un código de vestimenta de etiqueta.