Iryna Rozhyk es una modelo profesional, afincada en París y de origen ucraniano. Lleva muchos años ejerciendo de modelo y el modelaje se ha convertido en algo más que un trabajo para ella. Es su pasión y el tipo de vida que le gusta llevar.
Algunas de las mejores cosas de su portafolio son, probablemente, las portadas de revistas que ha hecho y el haber trabajado para grandes revistas como Vogue, Madame Figaro, Numero, L'Officiel y Elle.
El arte y la moda son dos cosas que Iryna ama. Entiende que en el mundo moderno, la moda en sí misma es publicidad. Sin embargo, cree que en los últimos años, la moda ha perdido su valor artístico. Aunque es una afirmación atrevida, todo el mundo está de acuerdo con ella.
Una de las mejores cosas de Iryna es que es extremadamente honesta y no le gusta fingir en su camino hacia la cima. Sabe que la moda consiste en ganar dinero y lo mismo ocurre con el arte. Personalmente admira la creatividad y los proyectos artísticos, pero sabe que la mayoría de la gente no los aprecia tanto como ella.
Iryna no trabaja para todas las marcas, le gusta ser honesta y sentir que tiene una verdadera conexión con lo que lleva, lo que al final solo la conduce a mejores resultados. Las marcas de moda aprecian el hecho de que sea sincera sobre lo que le gusta y lo que no; esto le permite trabajar al máximo cuando siente una conexión.
Las redes sociales son una plataforma que Iryna sabe utilizar bastante bien. Conoce los entresijos de Snapchat, Twitter, Facebook e Instagram, y los utiliza al máximo para promocionar su trabajo. Al fin y al cabo, las redes sociales lo han cambiado todo y ella lo ha sabido aprovechar. Sin embargo, una cosa que no le gusta demasiado, es el hecho de que si una joven modelo simplemente por el hecho de tener muchos seguidores, haga que las marcas la quieran, incluso si la modelo no tiene habilidades o experiencia para ser modelo.
Iryna prefiere las cosas a la vieja usanza, como la comunicación directa, en lugar de los posts a través de Instagram o Facebook, tener libros impresos y reunirse personalmente con la gente. Algunas de las campañas en las que a Iryna le gustaría participar son las de Dior, ya que le encanta la marca y cree que muestra la naturaleza sensual de la feminidad.
Algunos de los trabajos que Iryna ha disfrutado hasta ahora, incluyen trabajar para Uno De 50 y Swarovski, ya que ambos tienen un increíble equipo de creativos. Iryna quiere probar cosas nuevas y trabajar desde otro lado de la moda. También sueña con trabajar algún día en publicidad e intentar pasar a un nivel más artístico, además de gestionar modelos y cuidar de ellos, así como de la fotografía.
Iryna Rozhyk no tuvo la mejor de las experiencias en su primera agencia, por lo que le gustaría abrir algún día la suya propia para ayudar a las modelos y apoyarlas realmente. Aspira a gestionar su carrera en la moda como personalidad y no como modelo.